Parece mentira lo rápido que han pasado estas diez semanas... Tanta anticipación tuvo su recompensa, pero la relación con la serie de televisión ha sido fugaz, sobre todo en comparación con lo que representó leer la novela: toda una experiencia. Tengo mucho que agradecer a esta serie de HBO, ya que gracias al anuncio de su producción, entré en el universo de Canción de Hielo y Fuego y me uní a la causa con devoción e incluso con fanatismo. Espero con impaciencia Danza de Dragones y me identifico y solidarizo con los que temen que el autor no pueda acabar su obra.
La locura de Aerys Targaryen me acecha...
Como aquí cualquier cosa puede ser considerada spoiler por los más radicales, he preferido poner el aviso antes de empezar a comentar el detalle más ínfimo, ¡que la gente es muy sensible con este tema!
¿Queréis saber lo que es un spoiler de verdad? Cuando empecé a leer Juego de Tronos, no había llegado ni a la mitad del primer libro, un amigo me destripó sin miramiento alguno la muerte de Ned Stark. Esto es un spoiler, y no decir que el Lord Comandante Mormont le regala su espada a Jon Nieve. La diferencia es evidente y nunca nunca nunca se lo perdonaré. Jamás.
Dicho esto, ¿me ha gustado la serie? Muchísimo. Me ha maravillado. Tenía además gran curiosidad por saber cómo iban a recrear según qué emplazamientos, criaturas y por saber también qué apariencia le iban a dar a según qué personajes. En cuanto a este último punto, sólo dos discrepancias: Jon Nieve y Theon Greyjoy. En mi cabeza tenían otra pinta, pero claro está que esto nos pasará a todos con más de un personaje y más de dos.
Contenta con la elección del resto, en general y a grandes rasgos. Pero no tan contenta con una de las cosas que se nos han dejado ver y que corresponden quizá a etapas más avanzadas de la historia. ¿Es eso un gesto de arrepentimiento en el rostro de Jaime Lannister? ¿Es eso la sombra de la duda en la expresión desafiante del gemelo de Cersei? Lo dudo mucho, pero así es. En la serie parece ser que le han echado la gota de suavizante antes de tiempo. Lo entiendo, pero no me gusta demasiado.
Por el contrario, hay otras licencias, como la confesión sobre el origen del Maestre Aemon, o la escenita entre Renly Baratheon y Ser Loras Tyrell, que encontré muy esclarecedoras y me gustó que "allanasen el camino" en este sentido, en lugar de esperar más y dar paso a insinuaciones y hechos velados, algo que en la novela puede resultar mucho más fácil de realizar que en la serie de televisión.
Y mi último "pero" va para algo relacionado con la iluminación de los decorados. Y eso que a mi no me gusta comentar este tipo de cosas porque soy consciente de que me faltan vocabulario y conocimientos, los que leéis este blog sabéis que huyo de este tipo de comentarios... Pero en esta ocasión, hablaré de lo que ven mis ojos: un cambio demasiado sutil de luz, de claridad, entre lo que vemos en Winterfell, por ejemplo, y las escenas que nos muestran Desembarco del Rey. Y en ningún momento me llegó la sensación de un sol abrasador en las escenas que nos muestran la travesía de los Dothraki, algo que en mi cabeza, tenía que ser muy exagerado y no lo fue.
Por lo demás, la serie me ha parecido simplemente maravillosa. La implicación en el proyecto del escritor es garantía de éxito y de que nada importante se les ha quedado en el tintero. La serie me ha emocionado desde el minuto uno, desde que reconoces a esos niños jugando en el patio de Invernalia, hasta ese glorioso momento del último episodio en el que vemos a los pequeños hijos dragón de Daenerys Targaryen, uno de los personajes más fascinantes de la saga, por su componente mágico y legendario.
Siguiendo con los personajes por los que siento preferencia en la novela, destacar a Sean Bean, impecable en su papel de Lord Eddard Stark y también, el gran acierto que me pareció encontrar a Aidan Gillen (Carcetti de The Wire) en el papel de un personaje tan fascinante como es "Meñique", Petyr Baelish, el cual, habiendo terminado Festín de Cuervos, aún no sé por dónde me va a salir y eso me encanta.
Pero, y aunque sé que los más populares son Tyrion y Nieve, mis personajes favoritos de la saga son Arya Stark y Jamie Lannister. La primera, encarnada muy bien por la pequeña Maisie Williams, de ojos enormes, cara de pilla, cuerpecillo de lagartija... parece hecha a medida para el papel; y el segundo, un perfecto Nikolaj Coster-Waldau que ha trabajado mucho en su acento desde aquella fantástica New Amsterdam, tan injustamente cancelada. Los villanos siempre logran cautivarme y, aunque a villana nadie le gana a Cersei, yo me quedo con el niño mayor de Tywin Lannister como predilecto.
Podría estar enumerando cosas que me han gustado, detalles que me han impresionado, escenas que me han emocionado y frases que he coreado a voz en grito con los personajes de la serie. Pero no acabaría nunca. Así que cierro alegrándome porque se haya llevado a cabo el proyecto, porque se haya hecho de una manera que no sólo no me ha defraudado sino que además, ha superado mis expectativas, y porque sé que la segunda temporada está confirmada.
Mientras, volveré a devorar estos diez episodios, esta vez del tirón y en versión doblada al castellano (y si TV3 me la pone en Català, también caerá), y pensando que, mientras Danza de Dragones llega y no llega, quizá podría dar un repasito a Juego de Tronos.
Choque de Reyes en formato serie estará aquí antes de que nos demos cuenta, porque aunque en Poniente las estaciones duran décadas, por estas tierras no pasa lo mismo... el tiempo vuela y, aunque acabemos de inaugurar el verano, no debemos olvidar que se acerca el invierno.
La locura de Aerys Targaryen me acecha...
A PARTIR DE AQUÍ, ESTE POST CONTIENE SPOILERS... ASÍ QUE SI NO HAS VISTO JUEGO DE TRONOS... ¡¿A QUÉ ESTÁS ESPERANDO?!
Como aquí cualquier cosa puede ser considerada spoiler por los más radicales, he preferido poner el aviso antes de empezar a comentar el detalle más ínfimo, ¡que la gente es muy sensible con este tema!
¿Queréis saber lo que es un spoiler de verdad? Cuando empecé a leer Juego de Tronos, no había llegado ni a la mitad del primer libro, un amigo me destripó sin miramiento alguno la muerte de Ned Stark. Esto es un spoiler, y no decir que el Lord Comandante Mormont le regala su espada a Jon Nieve. La diferencia es evidente y nunca nunca nunca se lo perdonaré. Jamás.
Dicho esto, ¿me ha gustado la serie? Muchísimo. Me ha maravillado. Tenía además gran curiosidad por saber cómo iban a recrear según qué emplazamientos, criaturas y por saber también qué apariencia le iban a dar a según qué personajes. En cuanto a este último punto, sólo dos discrepancias: Jon Nieve y Theon Greyjoy. En mi cabeza tenían otra pinta, pero claro está que esto nos pasará a todos con más de un personaje y más de dos.
Contenta con la elección del resto, en general y a grandes rasgos. Pero no tan contenta con una de las cosas que se nos han dejado ver y que corresponden quizá a etapas más avanzadas de la historia. ¿Es eso un gesto de arrepentimiento en el rostro de Jaime Lannister? ¿Es eso la sombra de la duda en la expresión desafiante del gemelo de Cersei? Lo dudo mucho, pero así es. En la serie parece ser que le han echado la gota de suavizante antes de tiempo. Lo entiendo, pero no me gusta demasiado.
Por el contrario, hay otras licencias, como la confesión sobre el origen del Maestre Aemon, o la escenita entre Renly Baratheon y Ser Loras Tyrell, que encontré muy esclarecedoras y me gustó que "allanasen el camino" en este sentido, en lugar de esperar más y dar paso a insinuaciones y hechos velados, algo que en la novela puede resultar mucho más fácil de realizar que en la serie de televisión.
Y mi último "pero" va para algo relacionado con la iluminación de los decorados. Y eso que a mi no me gusta comentar este tipo de cosas porque soy consciente de que me faltan vocabulario y conocimientos, los que leéis este blog sabéis que huyo de este tipo de comentarios... Pero en esta ocasión, hablaré de lo que ven mis ojos: un cambio demasiado sutil de luz, de claridad, entre lo que vemos en Winterfell, por ejemplo, y las escenas que nos muestran Desembarco del Rey. Y en ningún momento me llegó la sensación de un sol abrasador en las escenas que nos muestran la travesía de los Dothraki, algo que en mi cabeza, tenía que ser muy exagerado y no lo fue.
Por lo demás, la serie me ha parecido simplemente maravillosa. La implicación en el proyecto del escritor es garantía de éxito y de que nada importante se les ha quedado en el tintero. La serie me ha emocionado desde el minuto uno, desde que reconoces a esos niños jugando en el patio de Invernalia, hasta ese glorioso momento del último episodio en el que vemos a los pequeños hijos dragón de Daenerys Targaryen, uno de los personajes más fascinantes de la saga, por su componente mágico y legendario.
Siguiendo con los personajes por los que siento preferencia en la novela, destacar a Sean Bean, impecable en su papel de Lord Eddard Stark y también, el gran acierto que me pareció encontrar a Aidan Gillen (Carcetti de The Wire) en el papel de un personaje tan fascinante como es "Meñique", Petyr Baelish, el cual, habiendo terminado Festín de Cuervos, aún no sé por dónde me va a salir y eso me encanta.
Pero, y aunque sé que los más populares son Tyrion y Nieve, mis personajes favoritos de la saga son Arya Stark y Jamie Lannister. La primera, encarnada muy bien por la pequeña Maisie Williams, de ojos enormes, cara de pilla, cuerpecillo de lagartija... parece hecha a medida para el papel; y el segundo, un perfecto Nikolaj Coster-Waldau que ha trabajado mucho en su acento desde aquella fantástica New Amsterdam, tan injustamente cancelada. Los villanos siempre logran cautivarme y, aunque a villana nadie le gana a Cersei, yo me quedo con el niño mayor de Tywin Lannister como predilecto.
Podría estar enumerando cosas que me han gustado, detalles que me han impresionado, escenas que me han emocionado y frases que he coreado a voz en grito con los personajes de la serie. Pero no acabaría nunca. Así que cierro alegrándome porque se haya llevado a cabo el proyecto, porque se haya hecho de una manera que no sólo no me ha defraudado sino que además, ha superado mis expectativas, y porque sé que la segunda temporada está confirmada.
Mientras, volveré a devorar estos diez episodios, esta vez del tirón y en versión doblada al castellano (y si TV3 me la pone en Català, también caerá), y pensando que, mientras Danza de Dragones llega y no llega, quizá podría dar un repasito a Juego de Tronos.
Choque de Reyes en formato serie estará aquí antes de que nos demos cuenta, porque aunque en Poniente las estaciones duran décadas, por estas tierras no pasa lo mismo... el tiempo vuela y, aunque acabemos de inaugurar el verano, no debemos olvidar que se acerca el invierno.
9 comentarios:
Me ha gustado la serie. La épica, venganza y demás historias no suponen nada nuevo, pero entretiene mucho. Me pondría con las novelas, aunque no soy mucho de literatura fantástica (elfos, anillos, gnomos y dragones no son lo mío) además de comerme todos los spoilers de la 2ª temporada. Pero me llama la atención ese numeroso grupo de seguidores de la Canción de Hielo y Fuego.
Daenerys con pelo cuando sale del fuego?? Me gustaba mucho el concepto de calvicie y sin cejas, como un renacimiento del dragón, por lo demás espectacular serie, y brutal adaptación, quizá la mejor que he visto de un libro en pantalla.
Calveras, tú por aquí...
Señor Marmota, ¡tiene usted toda la razón! También yo esperaba la transformación de Daenerys, pero supongo que de caras a la estética de la tv americana, era mejor mantenerla rubia y divina. Gracias por pasarte por aquí.
Llegué a la serie cuando sólo había emitidos 4 episodios y sin haber leído un sólo libro. Entre el capítulo 9 y 10 devoré el libro entero y no va a tardar en caer el segundo.
Mi personaje favorito sin duda es Arya, aunque muy de cerca están Tyrion Lannister, Jon Snow y Robb Stark.
Cersei me gusta pero de momento no me ha enganchado y Jamie Lannister no me gusta, probablemente de esto sí tenga la culpa el haber empezado a ver la serie antes que leerme los libros.
Saludos!
Está claro que cada uno vemos detallitos que no cuadran con nuestra visión de los libros, y yo también soy de los que le hubiera gustado ver la aparición entre las llamas de Dany calva y con los tres dragones.
El fichaje de Aidan Gillen es uno de los grandes aciertos de la serie.
Como dice Satrian cada uno tiene su visión propia de los libros, y aunque hay hechos que han cambiado creo que es una muy buena adaptación. Hay personajes y tramas que en los libros se pueden narrar tranquilamente pero que en formato televisivo se harían tediosas. Para mí uno de los aciertos ha sido ir eliminando todo aquello que era meramente secundario o aportaba muy poco a las situaciones y personajes para centrarse en lo fundamental y, al mismo tiempo, cuidar los pequeños detalles (una frase aquí, una miradita allá...).
Me ha encantado esta primera temporada. Magnífica adapatación. Lo que no perdonaré es la falta de algún guiño a cierta promesa ... :_(
Dany entre las llamas es un invento del ilustrador de la portada. En el libro dice bien claro que la encuentran entre las cenizas. Eso sí, yo he echado de menos el cometa, espero que lo saquen en la segunda temporada.
Y también he echado de menos la misma promesa que Manu. Que parte de la gracia del libro es especular sobre si J=R+L o no. XD.
Condesadedia: Dany entre las llamas no es un "invento del ilustrador de la portada". En el libro dice bien claro que se mete entre las llamas. Perdona que te parafrasee tanto, por cierto, pero con tanta vehemencia, pones difícil no hacerlo ;) . Y gracias por pasarte por aquí.
Manu: gracias por pasarte! Sé a lo que te refieres... Bueno, a mi me parece perdonable.
Starfighter y Satrian: es el peligro de adaptar novelas al cine o a la tv. De hecho, yo a veces prefiero que no lo hagan. :p
Evika:... y te estás devorando las novelas. ¡Como está mandado!
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