jueves, 30 de abril de 2009

In Treatment - Temporada 2, Semana 3 (2a parte)

Esta vez no es Paul sino Walter quien llega tarde a la cita. Llega tarde y como un torbellino: teléfonos a dos manos, cargado con la maleta, agobiado, en medio de una crisis en el trabajo. Y para postre, viene de visitar a su hija en Ruanda. No sólo de visitarla, sino de intentar tráersela de vuelta, lo que le lleva a una fuerte discusión con ella y a traer el corazón roto. Y lo que es más importante de caras a su terapia: a raíz de esta discusión tiene una pesadilla con el hermano que perdió siendo niño... Volvemos a los traumas infantiles y volvemos al sentimiento de abandono, lo que será una constante esta semana en In Treatment, parece ser. Vemos a Walter tomar ansiolíticos y Paul se encarga de deshacer la madeja y de dejarle claro que el hecho de que su hija se haya alejado de él, le provoca casi la misma sensación de abandono que le provocó la muerte de su hermano.


Al día siguiente, el viernes, Paul tiene su visita con Gina. Pero lo primero que vemos esta vez es a Paul desayunando con Tammy Kent. ¡Anda que han tardado, y eso que ella está casada! Bien, además de esto, vemos como Paul recibe una llamada de su hija informándole de que su padre está muy enfermo. El padre de Paul vive en una residencia costeada por Paul y también él tiene sentimiento de abandono provocado por la separación de sus padres. Su madre tenía un trastorno bipolar y él sigue muy enfadado con su padre porque se sintió solo para cuidarla, sin contar tampoco con la ayuda de Patrick, su hermano mayor, del que sabemos aún muy poco. En este episodio me ha sorprendido ver a un Paul Weston súmamente enfadado y súmamente resentido con su padre, así como, más tarde, a un Paul Weston reflexivo que parece ser que llega a una conclusión sobre los límites que tiene la culpa de su padre. Nada más entrar a su sesión con Gina la pregunta que yo me he hecho ha sido que si sabe lo suyo con Tammy, a lo que estoy seguro de que la respuesta es afirmativa. Al final, Gina prácticamente se lo deja claro, pero lo dejan para la próxima semana.

miércoles, 29 de abril de 2009

Heroes: Un final de traca

No sé qué esperaban los fans de Heroes, pero yo (que no soy fan, sólo espectadora) no esperaba nada. No tengo explicación al porqué sigo con la serie, pero lo que sí afirmo es que veré el siguiente volumen. Al contrario que Prison Break, Heroes no me hace dormir, y al contrario que muchas comedias, Heroes me hace reir. Anoche me reí muchísimo con la season finale que muchos opinan que debería ser una series finale. Yo no.

No es el propósito de los creadores de Heroes, hasta dónde sé, que esta sea una serie cómica. No creo que lo que busquen sea provocar la carcajada, pero a mí me la provocan. Me gustan las situaciones inverosímiles, las meteduras de pata, los gazapillos, las situaciones ñoñas y absurdas... Me río de Peter, que ha pasado a un segundo plano, para en el momento final del capítulo, resurgir y salvar la situación. Me gusta la apariencia de muñeca de trapo que tiene Claire, por lo inexpresivo y por ese sospechoso pelo artificial con el que se pasea últimamente... por no hablar de un color de piel marrón anaranjado muy muy extraño.

Una de las 'grandes escenas' del episodio fue cuando Claire observa por la ranura de la puerta cerrada el presunto palizón que Sylar les da a los hermanos Petrelli, ¡¡y no nos lo dejan ver!! ¿No había dinero para una escena así? Y eso por no hablar de lo fácil que les resulta a los hermanitos colarse en el Capitolio y convencer al tal Samuels de que el que está dentro no es el auténtico Nathan Petrelli, sino 'alguien muy peligroso'... ¡¡Y de qué manera!! En una escena que pretende ser emotiva, Nathan identifica al malvado como 'one of us' y vuela un poquito para que todos lo puedan ver. Sólo le faltaba decir: 'Atieeeendeeeee... mira, mira como vuelo', y el otro: 'Me has dejado picuetísimo'. Solicito una parodia de los chicos de Muchachada Nui pero ya, ¡¡por favor!!

Me da mucha risa la cara de imbécil que pone Matt Parkman cada vez que tiene que leerle la mente a alguien, y me hizo mucha gracia la manera forzada en la que Angela Petrelli lo convence para que intente ayudar a Nathan, con un discursillo barato y sensiblero. De Hiro y Ando mejor ni hablar, porque hace tiempo que el dúo perdió el norte y la compostura... ¡¡Hiro ya es mujer!! Lo del sangrado, y la teoría cutre salchichera que Mohinder le da sobre un virus que su cuerpo intenta expulsar, (recién levantado pobre hombre, no le pidáis más), es de juzgado de guardia. ¿Y qué me decís del apaño que hacen Parkman, Angela y Noah con Nathan y Sylar? ¡¡Fue brutal!! Fue tan malo que da varias vueltas de campana y se convierte en algo insólito que te hace plantearte muy seriamente la salud mental del equipo de guionistas. Yo creo que se rien del espectador, que dicen: '¿pensabais que habíamos caído bajo, pensabais que la serie era mala? ¡¡Pues ahora os vais a enterar!!'. Yo me quedé con las patas vueltas con la transformación final.

Y después de una gran carcajada, esperando nos quedamos a la presentación del próximo volumen, apostando por cómo se titularía, yo apostaba por 'El Recopetín' y casi acierto porque se llamará 'Redemption' y en lo que sí que acerté fue en el rollo relojero. Aunque yo esperaba más una mirada de Nathan Petrelli a su madre, tipo Michael Jackson al final del vídeo clip Thriller, con esa risa mega malvada: 'Haaa haaaa haaaaa'. Anda que no tengo ganas de que empiece el nuevo volumen: ¡No va a haber por dónde cogerlo! Será divertidísimo, seguro.

In Treatment - Temporada 2, Semana 3 (1a Parte)

Esta primera parte de la semana, hemos podido ver algunos fragmentos de lo que sería la vida de Paul. A mí esto me parece estupendo, es más, estoy súper a favor de una serie paralela, spinoff o lo que sea titulado por ejemplo: 'Paul Weston, ¿A qué dedica el tiempo libre...?'. Pero de momento, lo vemos interactuando con sus pacientes, pese a ser él el protagonista absoluto de In Treatment.

El lunes, Mia espera aterida de frío a Paul en la calle. Paul llega tarde, y no se sabe de dónde viene, ¿quizás de Maryland? No se nos dice. Ella está enfadada, está enfadada aparentemente por su falta de puntualidad, pero posteriormente se ve que no es sólo por eso... Mia está celosa: ha recibido la declaración de Laura (paciente de la primera temporada) en cuanto al caso de Alex. Aunque los papeles no van destinados a ella, ella se extralimita y entra en un terreno que no le corresponde, ya que la curiosidad por saber más sobre Paul, de quien aparentemente está enamorada (de una manera poco sana, según yo lo veo), puede más que su profesionalidad. Estoy segura de que Mia sería fan de esa hipotética serie sobre la vida de Paul que inventé hace un momento.

Paul le echa en cara lo que le dijo la semana pasada: 'You owe me a child', pero Mia le resta importancia. Como siempre, van tirando del hilo: ¿por qué Mia se siente tan sola? ¿Por qué Mia cree que la gente la expulsa de su lado? Como era de esperar, al final del hilo está la madeja del trauma infantil. Yo creo que, además de esto, influye mucho el que Mia no soporte hacerse mayor. Esta semana ha sido la que menos me ha gustado de las tres sesiones de Mia que llevamos desde que comenzó esta temporada. No me ha gustado su actitud, la manera en la que intenta hacer enfadar a Paul, tratándole de forma despectiva.

Cuando se marcha, se ¿olvida? la documentación con la declaración de Laura en la oficina de Paul, quien la recoge. La incógnita que se presenta es: ¿leerá Paul esta declaración, le podrá la curiosidad? Esta pregunta queda en el aire junto a la de: ¿de dónde venía Paul un lunes a las 7 de la mañana?



La sesión de Oliver con sus padres el miércoles comienza con una escena, de nuevo, que pertenece a la esfera privada de Paul: él está hablando con su hijo pequeño, Max, a través del ordenador. Esta situación nos sitúa en la faceta familiar de Paul, sobre lo cual hablará con Oliver durante un rato. Oliver sigue estando en medio del fuego cruzado que mantienen sus padres, quienes, tan ocupados en discutir y en solucionar sus propios asuntos, se olvidan de informar a su hijo de qué está pasando en su familia. Aparece un tema que desconocíamos: los padres de Oliver querían adoptar un bebé justo antes del divorcio, y nadie informó a Oliver de que esa idea ha sido deshechada. Oliver, volviendo a su conversación sobre cómo es Paul como padre, no se siente seguro con sus progenitores, le cuesta conciliar el sueño cuando está con ellos, en cambio, se queda dormido en la consulta de Paul. Oliver cree que Paul debe de ser un buen padre y muestra esta seguridad quedándose dormido en su casa.

Las sesiones del niño Oliver con su familia no me resultan demasiado interesantes, pero sigo pensando que Gabriel Byrne salva cualquier episodio con su excelente actuación.

martes, 28 de abril de 2009

Preparando el 2º Series & Tweets

Después de la anterior reunión de bloggers-twitters-frikis de las series, que tuvo lugar en el mes de febrero, pronto nos entraron las ganas de volvernos a reunir. Se decidió dejar pasar la quedada madrileña, por si algunos de los asistentes a la de Barcelona querían marchar hacia allá, pero finalmente hubo ausencia de presencia catalana en dicho encuentro, así que, sin dejar pasar más semanas, nos pusimos manos a la obra con la organización de otra reunión.

De momento, la mayoría se decanta para el día 9 de mayo, sábado. El lugar ha sido propuesto, pero a mí me gustaría que hubiesen más propuestas que barajar... Sea como sea, la quedada ya no está tan lejana en el horizonte y ya comienza a ser una realidad. ¿En qué consistirá? En un principio, en reunirnos alrededor de una mesa y charlar mientras comemos, y esta vez creo que calzados y todo. Y posteriormente, se planea una visita al bar de Lost, Bharma, en Poble Nou. ¿Y quién sabe qué más...? Todo esto, claro está, sazonado por nuestro interés común: las series de televisión americanas. Porque frikear es bueno, porque frikear es divertido, hago un llamado:

A los lectores de este blog que residan en Barcelona o cercanías, o que estén dispuestos a desplazarse hasta la Ciudad Condal para que nos veamos las caras: ¡¡pronunciaos!!.

Iron Maiden - Hallowed Be Thy Name



Iron Maiden - Hallowed Be Thy Name

Live at Rock in Rio

domingo, 26 de abril de 2009

Studio 60 - 'Caminemos mientras hablamos'


Esta serie, creada por Aaron Sorkin , hace una radiografía del programa de entretenimiento de la cadena NBS, Studio 60 y de todos los que en él trabajan. Una vez conoces a Aaron Sorkin es muy fácil ver su mano, sobretodo en el 'walk and talk', en los rápidos diálogos (razón por la que no me atreví a ver El Ala Oeste de la Casa Blanca en versión original) y en sus característicos personajes, tan complejos y pluridimensionales. Me mantuvo enganchada a El Ala Oeste de una manera nunca antes vista y ha conseguido que no pueda evitar emocionarme cada vez que hablo de la serie y recuerdo al Presidente Bartlet y a su equipo. Pero la principal diferencia entre El Ala Oeste y Studio 60 es que, mientras la primera fue muy exitosa y consta de siete temporadas, la segunda fue cancelada por baja audiencia tras 22 episodios emitidos. Una sola temporada que invita a hacer una inmersión total en la historia.

Una se pregunta si Aaron Sorkin lo sabe todo. Habiendo visto El Ala Oeste está claro que controla muchos temas para la gran mayoría desconocidos (sobretodo para los que somos ajenos a la política y legislación estadounidense) y, en el caso de Studio 60, demuestra un amplio conocimiento del medio, lo cual era de esperar: la censura, los contratos publicitarios, el cómo se escribe, se produce y realiza un programa de televisión, así como otros asuntos relacionados con las grandes corporaciones que dirigen y controlan los medios en Estados Unidos. Me gustan en especial las referencias a varios shows de televisión como Los Soprano, por poner sólo un ejemplo, y también a películas y a actores o actrices. Según he leído, el hecho de tratar tan a fondo sobre lo más intrínseco del medio, y el hecho de que el programa de la ficción se parezca tantísimo al Saturday Night Live de la realidad, provocaron muchas críticas en su día, ya que el gran público no podía evitar sentirse ajeno estas cuestiones internas tan concretas del mundo de la televisión. Para mí, esto no es motivo de crítica, sino todo lo contrario.

Bradley Whitford y Timothy Busfield, o lo que es lo mismo (para los fans de El Ala Oeste): Josh Lyman y Danny Concannon, repiten en Studio 60. En concreto, Timothy Busfield, en el papel del realizador Cal Shanley, aparece en los primeros minutos del capítulo primero, y me hizo especial ilusión reconocerle al instante, pese a que en Studio 60 aparece sin barba. Busfield también dirige alguno de los episodios, al igual que Whitford. Bradley Whitford, por su parte, siempre será Josh Lyman. Se reconocen en Daniel Tripp sus gestos, su forma de caminar, y la onda expansiva de testosterona que deja a su paso, aunque en Studio 60 no lleva un rollo tan de hipermacho como en El Ala Oeste. Además, se dice que los dos personajes principales de Studio 60, Matt Albie (Matthew Perry) y Danny Tripp (Bradley Whitford) están inspirados en Aaron Sorkin y Thomas Schlamme, compañero de éste, aventuras con las drogas incluidas.


Seguramente que, igual que para mí Bradley Whitford siempre será Josh Lyman, para los fans de Friends, Matthew Perry siempre será recordado por su papel de Chandler Bing en esa también longeva y exitosa sitcom que nunca se ganó mi favor. El personaje que interpreta, el del jefe de guionistas y co-productor ejecutivo Matt Albie, me gusta mucho, y el dúo que forma con Tripp es encantador: el de dos amigos muy buenos en su trabajo, que se complementan, y a la vez, dos amigos con problemas personales que se apoyan el uno al otro. De hecho, todos los demás personajes también me gustan mucho, con una excepción: Harriet Hayes, interpretada por Sarah Paulson. Me cuesta entender qué vio Sorkin en ella, porque si bien desconozco otros trabajos de la actriz, sí que me aventuro a decir que el personaje que interpreta en esta serie es de lo más soso y poco carismático que he visto en mucho tiempo.

Otros dos grandes personajes para destacar en lo positivo son Jordan McDeere (Amanda Peet) y Jack Rudolph (Steven Weber), dos de los jefes visibles de la NBS. Jordan me ha parecido encantadora por su punto de locura y por la historia que tiene con Danny, de principio a fin. Y Jack puede pasar de ser un auténtico cabrón a un encanto de hombre en cuestión de segundos. A través de ellos vemos toda la trama que nos muestra lo que es la cadena como negocio, los problemas legales, la presión de los datos de audiencia, los conflictos con los distintos grupos de opinión, sobretodo con la derecha radical... A este respecto ,y tal y como hizo en The West Wing, Sorkin no deja escapar la oportunidad de posicionarse en el asunto concerniente a las guerras de los Estados Unidos en países como Afganistán o Irak, y al terrorismo islámico.

Muchos otros detalles merecen ser destacados de esta serie que he devorado en poco más de 48 horas. El viernes por la noche empezamos y hoy domingo por la tarde la hemos acabado... y eso que el sábado salimos y pasamos gran parte del día fuera. Destacaría, por ejemplo, la risa que me provocó el susto que el muñeco 'reparado' por atrezzo les da a Danny y Jordan, o lo emocionante de la historia del hermano del actor del programa Tom Jeter (Nate Corddry), soldado en Afganistán, y también el desfile de caras conocidas que pasan por el show: Lauren Graham, Masi Oka, Sting o John Goodman (actuando como un juez muy peculiar en una comisaría de Nevada, en un episodio también muy peculiar), entre muchos otros.

Cuando leo las dificultades que tuvo la serie, que se emitieron primero 16 episodios y que después de un tiempo, vieron la luz los 6 últimos, cuando leo que no gustó, que se canceló, y muchas más cosas, me resulta muy extraño. Pero con esto de las cancelaciones, renovaciones y audiencias, de lo cual en las últimas semanas mucho se está escribiendo en diversos blogs y webs especializadas, nunca sabemos a qué atenernos, es una sucesión de sorpresas. Para mí, Studio 60 es una serie que vale la pena, muy recomendable. Y una serie de una temporada ya finalizada que se presta a un maratón. Y todos sabemos que un maratón es uno de esos placeres que todo seriéfilo aprecia especialmente.

viernes, 24 de abril de 2009

Tapeo de series - IV

ENTRADA LIBRE DE SPOILERS.

Pasar el fin de semana fuera de casa y tener la cabeza ocupada en tomar una decisión importante, son dos factores que restan tiempo para ver series. Aún así, no me quejo. Esta semana ha sido la semana de disfrutar del excelente capítulo 'Bad Dreams' de Fringe, de comprobar que Prison Break no va a ninguna parte, de no tener ni The Mentalist ni Lost, y también la semana de la noticia del aplazamiento de Kings hasta verano.



También he empezado con la tercera temporada de The Tudors. Después del 17 de Fringe me puse con el segundo capítulo y sigo pensando que están corriendo demasiado. También pienso que, aunque intenten caracterizar a Rhys Meyers para hacerlo parecer menos atractivo, deberían también pensar en engordarle, ya que esta era una característica muy destacable en Enrique VIII a partir de cierta edad. Pese a las licencias que se toma, supongo que a veces obligada por el tiempo o las cuestiones económicas, es una serie excepcional que me tiene enganchada, y de la que estoy viendo paralelamente la primera temporada en versión doblada, además de la tercera en versión original subtitulada.

Y tuve tiempo para dedicarle a Héroes, en detrimento de Gossip Girl, la cual me da un poco de pereza. El episodio 'I am Sylar', pese al título sugerente, no ofrece lo que puede parecer que promete. Sigue en la línea y el final del capítulo te deja desolado, como.pensando... '¿otra vez?', y no digo más para no soltar spoilers... aunque dudo que haya mucha gente a la que siga interesanto esta serie.

Curiosidad: en este 'I am Sylar' han ocurrido cosas y se han dicho frases que me han traído Lost a la cabeza. No sólo el que muchas veces se utilizase la expresión 'you are lost', 'i am lost' , o alguna variante más para referirse al mismo Sylar, sino que Danko muestra un reloj que, según él, le mantiene con los pies en la tierra, le hace recordar quién es realmente, ya que es un recuerdo de su padre; esto me ha recordado a aquel fenomenal 'The Constant' de la cuarta temporada de Lost y por último, a uno de los personajes le comienza a sangrar la nariz cuando intenta usar uno de sus poderes. ¿Una tontería como un templo? Pues sí, pero aquí la dejo.

jueves, 23 de abril de 2009

Día de Sant Jordi (Sin Libros)

Este año, el sol y el calor no han querido perderse el día de Sant Jordi. Quizás han leído los mensajes que hemos ido dejando por todas partes a lo largo de la mañana, maravillándonos de lo bonita que estaba Barcelona preparándose para un día grande, engalanándose, llenándose de flores, libros y senyeres.

A las dos del mediodía, con un sol radiante y una temperatura de 29ºC en el centro de la Ciudad Condal, era prácticamente imposible encontrar sitio para comer, caminar por las calles sin tropezar con alguien y avanzar sin pararte a curiosear en las paradas de libros. De camino a mi cita para comer he visto al señor Leopoldo Abadía, el de La Crisis Ninja, firmando libros en Paseo de Gracia, en la carpa de la Casa del Libro. Paseando por allí estaba Gerard Quintana, de Sopa de Cabra y algunos de los actores que aparecen en el programa de TV3 Crackòvia, quienes también tenían una pequeña carpa llegando a la calle Casp.

Después de comer nos dirigimos al FNAC. Entonces yo ya tenía mis tres rosas, las tres rosas que me han regalado en el día de hoy: la de mi jefe, la de los compañeros de trabajo y la de mi novio. Yo a mi novio no le regalo libro, puesto que no es lector. De ahí nuestra visita al FNAC, para que eligiese un CD, pero en lugar de un CD, el regalo ha sido este:

Cada uno, a lo suyo

Subir paseando por Rambla de Catalunya y volver a bajar de nuevo por Passeig de Gràcia nos ha dejado agotados, pero felices. Hemos visto, entre otros, y para nombrar a los más populares, a Joan Pera y a Óscar Nebreda, liándola como siempre. Liándola de buen rollo, los dos. Cada uno en su estilo y cada uno en su carpa. Todo el mundo sonreía, todo el mundo caminaba tranquilo... a veces demasiado despacito para mi gusto. Y como anécdota, contaros que en la puerta del Hotel Majestic, tras una nube de paparazzis y un buen grupo de curiosos, hemos visto a Blanca, la mujer de Borja Thyssen... Un señor me pregunta: '¿y esa quién es?', y yo le respondo: 'la nuera de Tita Cervera'. De esta:



Y yo que pensaba que algún escritor interesante estaba firmando libros, o saliendo del hotel, simplemente... Pero claro, no hubiese levantado tanta expectación.

Para terminar la crónica de la tarde: no me he comprado ni un sólo libro. Mi intención era comprar uno de los de mi laaaaaarga lista de 'deseos', y para eso he pensado entrar en la Casa del Libro, a la sección que me interesa y pasar de las paradas, pero cuando he visto la cantidad de gente que había dentro del local, que apenas podían caminar, he pensado que cualquier otro día es bueno para comprarse un libro, con más calma y sin agobios. Lo importante es vivir Sant Jordi. Y Barcelona se pone tan bonita...

miércoles, 22 de abril de 2009

Fringe 1x17 - 'Bad Dreams'

CUIDADO CON LOS SPOILERS

Lo mejor de lo que llevamos de semana en cuanto a series vistas ha sido el excelente capítulo 17 de Fringe, titulado 'Bad Dreams'. Tan enganchada y concentrada en el episodio he estado, que no he localizado ni al Observador, con lo que a mí me gusta jugar a encontrarlo. Os dejo un enlace a la Fringepedia, sobre este personaje, donde además se nos dice dónde aparece en todos y cada uno de los episodios.


Es que con el gorrito despista, el tío

Ha sido un capítulo relacionado con aquel otro titulado 'Ability' (el número 14, concretamente), en el cual se nos habla del ZFT Manifesto y en el que empezamos a descubrir qué le ocurrió a la Agente Dunham en su infancia y por qué está viviendo situaciones tan especiales, no sólo por los casos que investiga sino a nivel personal.

En 'Bad Dreams' avanzamos un poquito más con el tema de los experimentos que, aparentemente, el equipo de Walter Bishop llevó a cabo con un grupo de niños nacidos en 1979 en Jacksonville, Florida. Nick Lane es uno de esos niños, tratado con Cortexiphan y entrenado para formar un ejército de guerreros para 'la guerra que está por venir', tal y como dice el ZFT. Nick es un 'émpata a la inversa', es decir que contagia a los demás de sus propias emociones, que son autodestructivas. Nick lo recuerda todo de dichos experimentos y reconoce a Olivia cuando se la encuentra. La ha estado llamando en sueños, haciéndole observar las cosas horribles que esta 'empatía infecciosa' hace hacer a los que le rodean. Pero Olivia Dunham no puede recordar nada de aquellos experimentos a los que fue sometida siendo niña.


En este episodio Olivia actúa tanto de investigadora como de parte investigada. Ella ya conocía sobre su tratamiento con Cortexiphan, gracias a la información recibida de Nina Sharp, de Massive Dynamic, en aquel capítulo 14. Nina le habló sobre esta droga, creada por William Bell, fundador de los laboratorios y antiguo compañero de Walter Bishop, que sirve para estimular de manera artificial el cerebro de niños limitando así su degeneración con el paso de los años. Lo que Olivia desconocía hasta el momento es la implicación de Walter, y al final del capítulo, tenemos una gran escena de éste visionando una vieja cinta de vídeo 'beta' en el que aparece una pequeña niña rubia que sin duda tendrá que ser la Agente Dunham.

'Bad dreams' ha dejado el listón muy alto, preparándonos para la season finale, que tendrá lugar el próximo 12 de mayo y que promete. Hace varias semanas que me admiro de qué gran capítulo de Fringe que acabo de ver, y en esta última creo que se han superado.

Prison Break y The Mentalist: un par de despropósitos


A veces pasan cosas que se escapan al entendimiento, y hoy no me estoy refiriendo a la serie Heroes. Me refiero, en primer lugar, al alargamiento sin ton ni son de Prison Break. Yo soy de las que piensan que la cuarta temporada no está siendo tan mala como la tercera, y que el enfoque tipo 'Equipo A en apuros' no estaba del todo mal. Pero si hubiesen llegado a una conclusión antes de este largo y absurdo parón, creo que la serie hubiese terminado de una manera digna y que con el tiempo quizás hasta se recordaría con buen ánimo. Pero no, hay que alargar. Después de un parón tan grande, cuesta retener en la memoria algunas cosas, y este capítulo 17, 'The Mother Lode', personalmente me ha parecido de lo más aburrido.

Para no espoilear, no daré muchos más detalles, pero es que a mí ni 'el personaje sorpresa' me ha sorprendido. Lincoln pone unas caras de gilipollas cuando le pasa algo que dan ganas de pegarle una patada al televisor. Michael Scoffield es un personaje insulso, su relación de pareja es igual de sosa o más, y el único que valía la pena que era Alex Mahone, ya no reparte hostias a diestro y siniestro como antes. Vamos, que no están en forma. Por cierto, ¿os habéis fijado en lo gorderas que está Scoffield?

Con The Mentalist el despropósito de este final de temporada es como poco, ridículo. Vamos a ver: se emitió hace dos semanas el capítulo 19. Se decía, se comentaba, que la season finale venía con el 20. Después leí en alguna parte que se añadirá un episodio más. Miedo me da. Si no están, hace ya días, sacando nada de la trama de John el Rojo y centrándose únicamente en casos autoconclusivos, no veo el objeto de este alargamiento. Pero, sea como sea, el despropósito no viene al querer alargar la temporada, sino a la manera en que lo están haciendo: dos semanas de parón y luego el final o los dos capítulos que quedan para el final. Veamos si finalmente hay que esperar al 29 de abril como se dice para ver más, o podremos tener algo antes... Quien los entienda que los compre.

EDITO...

Para añadir a esta lista de despropósitos, una mala noticia referente a la serie Kings, que con tan sólo 6 capítulos emitidos, queda aparcada hasta verano. Aquí, la noticia en 'Vaya Tele', escrita por KyraVT. Una lástima, si lo sé, no la empiezo a ver. Ahora se me queda ahí una serie mutilada en el tintero que, a saber si realmente vuelve en verano tal y como se ha anunciado...

martes, 21 de abril de 2009

In Treatment - Temporada 2, Semana 2


Esta semana, Mia ha acudido a ver a Paul Weston, en lugar de reunirse en el bufete de abogados donde ella trabaja, tal y como ocurrió en la pasada semana, al piso de este, donde vive y donde recibe a sus pacientes, en Brooklyn. Mia ya no lleva el proceso al que se enfrenta Paul, sino que acude a verle un poco como visita de cortesía. Ella se niega a llamarlo una sesión de psicoterapia, ella lo que le pide a Paul es simplemente 'ayuda'; pero los hechos son claros y al final del capítulo la sensación que queda es la de haber presenciado otra de las reuniones de Paul con uno de sus pacientes para tal fin.

En esta reunión, Mia culpa a Paul de todo lo que le ha ocurrido en los pasados veinte años, desde que terminaron su tratamiento. La principal de estas acusaciones se centra en un presunto mal consejo, o en lo que ella cree que fue un consejo de Paul para no llevar adelante su embarazo, cuando ella tenía 22 años. Naturalmente, Paul le dice que se asegure que él le dijese tal cosa... y es que cuesta creer que un terapeuta te haga una recomendación como esa. La cuestión es que la frase que Mia le dice a Paul a la hora de la despedida, es demoledora: 'Me debes un hijo'.

Tal y como me pasó la semana pasada, después de este episodio centrado en Mia me he quedado con ganas de más.

Luego le tocaba el turno al capítulo correspondiente al martes, con April. La semana pasada lo dije: me dio muy mal rollo. Me planteé no seguir estos capítulos y lo he hecho. He dudado mucho y he estado un rato pensando en si verlo o no, y finalmente, he pasado al de Oliver, el niño cuyos padres se están divorciando, dejando a April para el final o quizás para nunca. Las sesiones con Oliver siguen igual, no se hacen pesadas ni tampoco tremendamente interesantes. Pero no sé qué tiene In Treatment, creo que la palabra es 'hipnotizante'. Esos partidos de tenis en forma de conversación, el toma y daca, incluso los silencios, a mí me tienen con las orejas bien atentas y los ojos pegados a la pantalla. Incluso respiro con cuidadito para no perder detalle de lo que estoy viendo y escuchando. Y estoy absolutamente segura de que la culpa de esto la tiene Gabriel Byrne, su personaje Paul. Da la sensación de que los pacientes son meros complementos para que él haga su trabajo de manera impecable.

El cuarto día de la semana es para Walter. El hombre de negocios con crisis de pánico cuya hija está en Ruanda haciendo trabajos humanitarios. En esta sesión me ha parecido que han dado pasos de gigante en el diagnóstico. Se han remontado a la infancia de Walter, quien perdió un hermano siendo un niño. De hecho, esta semana, si tenemos en cuenta las reuniones con Mia, con Walter y la que mantiene el mismo Paul con Gina, todas tienen algo en común: la importancia del pasado, del paso del tiempo, de lo que fueron y ya no son, o de lo que podrían haber sido si las circunstancias hubiesen sido diferentes.

En el capítulo de Walter aparece Rosie, la hija de Paul, quien va a visitarle y le dice 'no te mereces esto'; realmente, es la misma sensación que yo tengo en cuanto a todo el tema del divorcio entre Paul y Kate. Y es Kate quien aparece por primera vez en esta temporada en el quinto y último episodio de la semana, en la reunión que Paul tiene con Gina. Además de Kate, vuelve a aparecer Tammy Kent. Tammy Kent adquiere importancia y se intuye que en los próximos episodios tendrá un papel crucial en la serie, y en lo que a las sesiones de terapia del mismo Paul se refieren. Ella era su novieta en el instituto, y además su vecina. Paul tiene lagunas sobre una noche en la que ocurrió algo malo a su madre, y cree que Tammy Kent puede tener la clave. Aunque le ha prometido a Gina que, mientras ambos sean pacientes suyos, no tendrán una relación, al final del capítulo se le ve llamándola, en principio para preguntarle por su madre, pero yo creo que algo más ocurrirá.

Las sesiones de Paul con Gina siguen siendo mis favoritas. Además de tratar sobre Tammy Kent, sobre su pasado y sobre pacientes de la primera temporada como Alex o Laura, hecho que me parece super positivo ya que da una continuidad a la serie y a los personajes que me gusta mucho, destaco que quizás no estoy tan equivocada en aparcar (ya sea temporal o definitivamente) las sesiones de los martes con April. La única duda que tenía sobre si hacerlo o no era por si después esta decisión iba a hacer que me perdiese cosas importantes de los capítulos con Gina, y no. En esta sesión por lo menos, el nombre de April no ha aparecido para nada. Bueno, de hecho, en esta sesión, ninguno de los pacientes que actualmente Paul trata han salido en la conversación. Así que de momento, April se queda en el tintero.

lunes, 20 de abril de 2009

Meme número 246.465.121

Sunne me pasa el marrón me hace el honor de darme este premio y por extensión, de hacerme 'portadora' de este meme.

Portadora del anillo, lo que yo te diga

Como todo buen meme que se precie, tiene unas reglas:

1. Mostrar el premio.

2. Enlazar a quién te lo entrega.

3. Pasárselo a 10 personas y avisarles para que lo recojan.

Ahí voy con los 10 blogs premiados, y voy a intentar evitar dar el primero a los de siempre, igual que se ha propuesto Sunne:

1. Marinaren Txokoa, de Marina.

2. Cajón de Sastre, el de Pigonna.

3. Maybe Tomorrow, el de Kyra.

4. Boulevard of Broken Dreams, de Anade.

5. Diamantes en serie, de Nahum.

6. Blog and the City, de Syl.

7. La mazmorra del olvido, de Ramelot.

8. Dolls and Rock & Roll, de Montse.

9. Truth Kills, de Satrian.

10. One Hundred Tears Away, de Harmony.

Fangoria - Más es Más



Fangoria - Más es Más

22 de Mayo en el Palau St. Jordi de Barcelona... yo quiero ir. ¿Quién se viene?

viernes, 17 de abril de 2009

Castle: Seis capítulos después

Hace seis semanas se estrenó Castle, la serie protagonizada por Nathan Fillion en el papel de un escritor de novela policíaca y de suspense, que inicia una relación como colaborador con la policía de Nueva York. Hasta aquí, nada nuevo bajo el sol, la típica serie muy en la línea de The Mentalist o Life (personaje carismático resuelve crímenes sangrientos). La gracia de la serie estaba en el protagonista, pues: Nathan Fillion, conocido como el cancela-series. Cuando empecé a ver Castle ni siquiera había visto Firefly (mucho menos al Dr. Horrible) y mi recuerdo de Fillion en Mujeres Desesperadas era y sigue siendo muy borroso. Y como la gracia de Castle está en lo simpático o no que te caiga el protagonista, fue muy oportuno simpatizar con este actor canadiense, sobretodo gracias a su papel como el Capitán Malcolm Reynolds en Firefly.



A PARTIR DE AQUÍ, HABLARÉ SOBRE LO EMITIDO HASTA EL SEXTO CAPÍTULO INCLUIDO SIN OMISIONES

No sólo de su personaje principal vive Castle (¿o sí?). Los casos en los que se centra cada episodio también han de ser buenos y por lo general, lo son, aunque he de decir que en episodio número 4, titulado 'Hell Hath No Fury', me lié de mala manera. Me pareció demasiado rocambolesco. En cambio el último capítulo, el de esta semana, 'Home is where the heart stops' no ha sido tan interesante como otros, aunque ha tenido otros alicientes, como la aparición en escena de la ex-mujer de Rick Castle y madre de su hija. Este nuevo personaje ha proporcionado varias escenas cómicas en este episodio, pero no mucho más. No sé si volverá a aparecer o si habrá sido un hecho puntual, pero a mí no me ha dado tan buen rollo como me dan la madre y la hija de Castle, las cuales hacen apariciones cortitas, pero muy bien aprovechadas en cada capítulo.

Volviendo a los casos en sí, el que corresponde al quinto capítulo: 'A Chill Goes Through Her Veins', el de la muerta congelada, me pareció muy bueno, también rebuscado, pero muy bien planteado y muy bien resuelto. La relación de colegueo entre Castle y la detective Beckett (interpretada por Stana Katic) mientras intentan resolver el misterio, me pareció un gran momento, junto a ese otro momento divertido en el que Rick Castle juega con su hija a pegarse tiros ficticios con unas pistolas láser en el salón de su casa, mientras la madre de éste se pasea con una mascarilla en la cara y justo entonces Beckett acude a visitarle. Las caras de Fillion en estas situaciones cómicas son de diez.


Por último, destacar positivamente el nuevo prisma con el que vamos a mirar a Beckett a partir del quinto episodio. Ya sabemos algo más de su vida, ya sabemos qué desgracia familiar la atormenta. Y Castle parecía que iba a tirar del hilo, pero lamentablemente y como suele ocurrir en este tipo de series, en el capítulo 6 no han continuado con la trama, y lo han dejado todo en nada. ¿Sería simplemente curiosidad lo que llevó a Castle a leer los archivos relacionados con la familia de Beckett? ¿O descubrirá por ella al asesino de su madre? ¿Usará su desgracia para una de sus novelas?... Esto último estaría muy feo, pero aún no conocemos demasiado a Rick Castle. Así que todo puede ser.

Tendremos que esperar algunos capítulos más para conocerle mejor, para saber en qué desemboca su relación con la detective Beckett y también para saber si la ABC cancelará o no la serie de manera precipitada. Según la web TV by the Numbers, su futuro no tiene demasiada buena pinta: los datos de audiencia no son buenos, la tendencia es además a la baja y seguramente no se renueve... ahora, a esperar que no haya cancelación repentina. Crucemos los dedos porque nos dejen disfrutar un poquito más de la compañía de Castle.

Agradezco a Adri que haya mostrado en su blog el enlace a esta web tan útil para conocer todo esto de las audiencias en USA: http://tvbythenumbers.com/.

jueves, 16 de abril de 2009

Un 'wish list' de películas

Ver series está muy bien, pero de vez en cuando también se echa de menos un poquito de cine. Lo malo es que no es lo mismo buscar un hueco para un capítulo de 20 ó de 40 minutos incluso, que buscar 2 horas libres para dedicarte a ver algo. Actualmente, estas son las tres películas que tengo en mente para ver próximamente:

- The Reader: aún no la he visto y me la han recomendado mucho. Incluso amigos que me conocen bien me han dicho que me gustará. La tengo hace tiempo esperando en el disco duro del DVD.

- Masters del Universo: sí, la de Dolph Lungren. ¡¡Me encanta esta película!! Mi padre me la grabó del Plus hace como ¿15 años? No sé, sólo sé que la he visto cientos de veces y que tuve un montón de pesadillas con Skeletor. Aún así, es una de mis favoritas y de vez en cuando me pica el gusanillo de volverla a ver. Como ahora.

- Velvet Goldmine: con Jonathan Rhys Meyers, Ewan McGreggor, Christian Bale y Toni Collette. Hace también un tiempecito que vi esta película, y la vi más de una vez. Mi hermana se la compró en VHS, me la dejó y yo me la copié. El otro día la 'conseguí' y está esperándome en el disco duro del portátil. A ver si encuentro un momento. Curiosidades de la vida, la otra noche salí con los colegas y una amiga me habló de lo mucho que le gustaba, incluso canturreamos esta canción de su fenomenal banda sonora, 'Ballad of Maxwell Demon'.


miércoles, 15 de abril de 2009

Fringe - 1x16: 'Unleashed'

Ver un capítulo de Fringe con el corazón en un puño y tapándote cada tanto media cara con la manta o el cojín, es todo un qué. La gran aventura del capítulo 16. La pena repentina porque sólo queden 4 para la season finale. La satisfacción de haber visto esta serie desde el principio, sin abandonarla, cuando muchos renegaron de ella. Y es que Fringe se ha ido superando, y los capítulos que estamos viendo desde mitad de temporada, aproximadamente, a mí personalmente me están fascinando.


A PARTIR DE AQUÍ, COMENTARÉ EL CAPÍTULO 16 SIN TAPUJOS



En el de esta semana, Olivia y sus compañeros se enfrentan a la aparición de un 'monstruo': un híbrido entre varios animales que da como resultado una bestia enorme, agresiva, aterradora, que ha sido puesta en libertad por accidente y va atacando a gente a diestro y siniestro. A lo largo del episodio podemos ir viendo partes de dicho monstruo, sobretodo la cola, pero no lo llegamos a ver del todo hasta el final, cuando Walter Bishop muy valiente, o muy inconscientemente, se enfrenta a él, cara a cara. Walter se siente responsable por la existencia de la bestia, ya que él estuvo investigando sobre este tipo de experimento genético, de animales transgénicos, pese a que no tuvo éxito. Finalmente, se le notifica que sus investigaciones no tuvieron nada que ver con lo que finalmente ha dado resultado gracias o por culpa de otro genetista.

Además de este gran momento hacia el final del episodio, en el que Walter decide actuar como héroe, en el que empuña su arma y tirotea al monstruo (espantoso, pero maravillosamente bien hecho), hay otro momento muy emocionante que afecta a uno de los compañeros de Olivia Dunham: a Charlie Francis. El agente Francis, según mi opinión, es el típico secundario que cae simpático pero del que no te fías. Personalmente, no me fío de él, me da miedo que al final se descubra que es un agente doble o algo... Sea como sea, en este capítulo, Charlie es atacado por el monstruo y está incubando en su interior a las crías de éste. Por un momento he estado convencida de que la relación del agente Francis con Fringe se había terminado, pero afortunadamente, Walter ha podido salvarle.

Mención especial a la aparición de El Observador. Me encanta este personaje, en cada capítulo me encanta descubrirle. Y en esta ocasión ha salido nada más y nada menos que en televisión.


¡¡Brutal!!

Si bien hacia mediados de esta temporada veía esta serie sin excesivo entusiasmo, y más que nada porque el personaje de Olivia Dunham me encantaba, y sigue fascinándome, a estas alturas muchos son los motivos por los que sigo Fringe. No solamente me tiene enganchada por sus personajes, por absolutamente todos sus personajes (incluso la señora misteriosa de Massive Dynamics, que desafortunadamente, hace un tiempecito que no aparece con un papel importante), sino también por todos y cada uno de sus casos. El de la pasada semana, 'Inner Child', con aquel niño encontrado no sé sabe bien por qué en un sótano, en el que parecía haber estado encerrado durante décadas y el cual poseía una habilidad especial, fue un capítulo espectacular. Afortundamente, esta semana no ha bajado el nivel, y con este 'Unleashed', Fringe me han tenido pegando botes en el sofá y disfrutando como una loca.

In Treatment - Temporada 2, Semana 1

Ver una semana de In Treatment del tirón me parece una muy buena manera de ver esta serie, y es de la manera en que ya vi su primera temporada. La primera temporada me gustó mucho al principio aunque luego decayó un poquito mi entusiasmo por ella, para finalmente dejarme un buen recuerdo. Esta segunda temporada ha empezado así:

1. Lunes: Mia. Mia es el nombre de la abogada que llevará la demanda a la que se enfrenta Paul Weston (Gabriel Byrne) interpuesta por la familia del personaje de la primera temporada, Alex (Blair Underwood). Paul y Mia tienen una historia previa, ya que él fue su terapeuta muchos años atrás. Lo que empieza siendo una reunión de trabajo por el caso legal, desemboca en algo bastante parecido a una sesión de terapia y en una retahíla de reproches de Mia hacia su ex-terapeuta.

El personaje de Paul le sienta a Gabriel Byrne como un guante. Sus expresiones, la manera de hablar... se me hace tan creíble que a veces me pregunto si Byrne no se estará interpretando a sí mismo. Supongo que la cuestión es que es muy buen actor. Y estas reuniones con Mia se me antojan muy sustanciosas, me he quedado con muchas ganas de ver la continuación. Y eso es genial.

2. Martes: April. En cambio las sesiones con April me han despertado sentimientos negativos. Lo que le ocurre a esta paciente es duro, feo, terrible. Y es probable que incluso me salte estas sesiones, ya que soy muy sensible para según qué cosas y no quiero pasarlo mal. Destaco de nuevo las caras de Gabriel Byrne, sobretodo en el momento en el que ella le pasa un papelito en el que ha escrito lo que le ocurre, y él pone una expresión de desconcierto impresionante.

3. Miércoles: Oliver y sus padres. Oliver es un niño cuyos padres están en proceso de divorcio. Los padres acuden a la sesión con el crío. No es el episodio que más me ha gustado, creo que es bastante típico: el niño que se ve en medio del fuego cruzado entre los padres que se están divorciando. La gracia reside en la mano izquierda que Paul tiene con el crío. Y es que siempre es Paul (o Byrne) el que reluce, el que nos regala una actuación magistral.

4. Jueves: Walter. Este personaje, interpretado por el veterano actor británico John Mahoney, me ha gustado mucho. La manera que tiene de hablar sobre su hija, de leerle a Paul el e-mail que ella le ha escrito, es emocionante. Es un personaje que se me antoja entrañable. Walter es un importante hombre de negocios que acude a terapia porque tiene problemas para dormir, tiene que lidiar con una vida estresante... lo que es de recibo en su trabajo y posición. Un episodio con mucha carga emocional. Junto con las sesiones de Mia del lunes, creo que las de Walter serán de mis favoritas.

5. Viernes: Gina. Por último, Paul acude a visitar a su vieja amiga y mentora, Gina. Me alegra que lo hayan mantenido para esta segunda temporada, ya que esas sesiones eran de mis favoritas en la primera. Gracias a las reuniones que Paul tiene con Gina podemos saber más sobre él, ya que se abre, muestra su mal genio, su sarcasmo. Gina sin embargo es toda dulzura y calma, ya ha escrito su libro y ha reanudado su trabajo como terapeuta, visitando a pacientes; Paul aún no ha leído este libro porque, tal y como ya se nos dejó saber en la primera temporada, él aparece.

En un principio, Paul va a casa de Gina a hablar sobre el tema de la demanda a la que se enfrenta y por la que Gina tendrá que ir a declarar. Pero finalmente, le reconoce que necesita ayuda, que necesita alguien en quien confiar, y acuerdan mantener unas sesiones de terapia a la vieja usanza, y no sesiones de supervisión como las que tenían en la anterior temporada.

En resumen, esta primera semana me da que pensar que la segunda temporada tiene, al igual que la primera, de todo un poco. Es inevitable que no todos los personajes gusten, es inevitable que entren ganas de saltarse algunas sesiones. Y seguro que algunos de los pacientes que ahora no me llaman demasiado la atención, pasen a sorprenderme, y a la inversa. Pero eso habrá que verlo semana a semana.

martes, 14 de abril de 2009

Down al Sonisphere

Como ya he comentado con anterioridad en el blog, el 11 de julio en el Parc del Fórum de Barcelona tendrá lugar el Festival Sonisphere. Y es que toda propaganda es poca, ¡para un festival que se hace en esta ciudad! ¡Y además un festival de Metal!


Una de las bandas en cartel son los Down, el grupo de Phil Anselmo, el vocalista de Pantera, junto a Pepper Keenan a la guitarra, Rex Brown al bajo (Rex también era el bajista de Pantera) y Jimmy Bower a la batería. Son originarios de Nueva Orleans, aunque muchos seguimos pensando que son texanos, ya que Pantera son de dicho estado. Down sacó su primer LP en 1995, titulado 'NOLA' y en 2007 salió al mercado el último: 'Down III: Over the Under', el segundo disco he de decir que no lo he escuchado (se titula 'Down II: A Bustle in Your Hedgerow' y es de 2001). Y pese a que siempre me gustó mucho Pantera, nunca me había entretenido a escuchar a Down, ya que tenía la idea preconcebida de que iban a ser demasiado bestias para mí.

Cuando se anunciaron para el Sonisphere le pedí a mi pareja que me grabase algo de ellos y ha sido una grata sorpresa, ya que se me antojan bastante parecidos (un pelín más rudos, quizás) a una de mis bandas favoritas del momento: los Black Label Society de Zakk Wylde.



Este tema, Temptations Wings, pertenece al primer trabajo del grupo, NOLA.

Semana Santa en Episodios

Jueves Santo: No es festivo en Catalunya, pero yo me lo cogí a cambio de un puente en Septiembre, para irme a Londres. Antes de viajar vi el último capítulo de United States of Tara para quitármelo de encima y porque pensaba que no me daría tiempo a ver nada más largo. Dije que no merecía ni un post, y lo mantengo.


Lo grande vino cuando, teniendo todo listo, calculé el tiempo que faltaba para salir de casa y me di cuenta de que me daba tiempo de ver el 5x12 de Lost, 'Dead is Dead'. ¡¡Fantástico!! Ya lo tenía listo con subtítulos y demás, así que al ataque. A estas alturas, poco queda decir sobre este espectacular capítulo que te acelera el corazón, te emociona y te deja flipando desde que empieza hasta que termina. Te deja más o menos con la cara que pone Ben Linus en esta foto que adjunto. Y no hace falta decir que volví a aplaudir con muchas ganas cuando terminó. Y es que Lost lo merece todo.

El domingo regresamos de nuestra escapada a Londres. Cansados, como tiene que ser. Algo resfriados, también. Cuando llegamos a casa, por la tarde, quién mejor para darnos la bienvenida que los chicos de Muchachada Nui. Destaco el cabreo del Píxel en el gag de Enjuto Mojamuto y la parida 'Un día en la vida de Paul Stanley'. ¡Cualquier excusa es buena para disfrazarse de los KISS!



Y lo que pintaba como una tarde seriéfila total, se quedó en la menda frente al portátil y mi novio viendo una peli. Luego, demasiado cansada para nada más, me acosté dejándome varias cosas interesantes pendientes... Como por ejemplo, el capítulo 5 de Kings, que vi ayer lunes antes de comer. Es una pena que la serie ya esté padeciendo en USA con cambios de horario y demás, pero hay que reconocer también que no es una serie facilona, ni un culebrón de los que enganchen. Es una buena serie, pero también se me antoja una serie 'delicatessen'. Esperemos que la audiencia sea respetable y pueda por lo menos cumplir con los 13 capítulos que hay previstos.

Después de un documental de esos que encuentras a tu alcance sin saber muy bien de dónde salen, dedicado al Heavy Metal, le llegó el turno a Fringe. Esperaba con muchas ganas el regreso de Olivia Dunham y este episodio titulado 'Inner Child' me ha gustado mucho, tal y como esperaba. Hace ya bastantes capítulos que esta serie encontró su camino y se convirtió en cita semanal ineludible. Muchos la abandonaron en los primeros episodios, pero los que fuimos pacientes, somos afortunados de poder disfrutar de estos casos que, aunque conclusivos, se ocultan bajo el manto del 'el Patrón' que sutilmente los relaciona.

También ayer lunes empecé con la segunda temporada de In Treatment. Tal y como hice en la primera temporada, recopilo los episodios por 'semanas', es decir: de cinco en cinco. He empezado con esta primera semana, y la impresión que me ha producido es muy buena, pero escribiré más a fondo sobre lo que he visto en otro post, ya que considero que este estreno lo merece.

Finalmente, y para cerrar estos días de fiesta, y además como consecuencia de nuestro viaje a Londres, a mi novio le entró el gusanillo de Los Tudor. Así que ayer empezamos (yo por tercera vez ya) la primera temporada, esta vez en versión doblada. Yo ya será dos veces que la veo en versión doblada, más una que la vi en versión original. ¡¡Pero no me canso!!

domingo, 12 de abril de 2009

Escapada a Londres


El viajecito a Londres ha salido a la perfección. El principal objetivo de este viaje era la visita al British Museum y alguna visita cultural más y las hemos cumplido todas, y con creces, ya que hemos visitado algo más de lo que teníamos previsto, hemos caminado mogollón y afortunadamente, apenas nos ha llovido.

Llegamos el jueves por la tarde al hotel. Situado en la zona de 'la City', dejamos los bártulos en la habitación y salimos a dar nuestro primer paseo. Muchos currantes de traje y corbata dan la bienvenida a la Semana Santa pinta en mano atiborrando los pubs y las calles de la zona. Hay mucha vidilla. Tomamos algo y no nos recogemos muy tarde porque al día siguiente hay que levantarse pronto.


La primera visita del viernes es al British Museum. Tenemos suerte y durante el paseo del metro al museo no llueve, y más suerte tenemos aún cuando un cartel nos dice que el Viernes Santo el museo está cerrado pero que en esta ocasión, y de manera extraordinaria, nos dice el segurata, el museo está abierto. Suspiro de alivio y para adentro. La primera vez que estuve fue hace unos 14 años y por aquellos tiempos yo no estaba tan interesada en las cosas que se pueden ver allí. No obstante me impactó, pero no tanto como esta vez, en la que he alucinado con lo que ya recordaba, he redescubierto cosas a las que no había prestado atención y, sobretodo, me emocioné al encontrarme de morros con esta Cariátide. La cara que tengo en la foto parece de susto, pero es de pura emoción. Es una visita obligada, vale la pena ir a Londres exclusivamente para visitar este museo.

British Museum


Saliendo nos dirigimos a Piccadilly, para pasear y para ver tiendas de discos y demás. Ahí es cuando se nos pone a llover. Es una lluvia fina pero naturalmente, es un incordio. Una cosa es ir preparados para que te llueva y otra es encontrarte con la molestia del chispeo constante. A ratos afloja, a ratos no llueve... Entramos en alguna megastore de DVDs y demás a ver series, cosas de música... pero todo más caro que en Amazon, así que seguimos paseando hasta Covent Garden y por allí aprovecho para comprarle un regalito a mi sobrino. Comiendo planeamos qué hacer durante la tarde. Las alternativas que incluyen pateadas con el frío que se ha girado y la lluvia intermitente, pasan a un segundo término y decidimos visitar el Museum of London.

Algún compañero de la UOC me lo había recomendado, pero no lo teníamos previsto. Nos bajamos en la parada de Bank y paseamos un rato hasta allí, viendo el Banco de Inglaterra y otros edificios que ya conocíamos de 'la City' pero que a plena luz de la tarde, tienen otro aspecto que por la noche. El museo, como los demás, es gratis; esto es de las cosas fantásticas de Londres. Allí podemos ver muchas de las cosas que leí hace poco en el libro La Formación de Inglaterra de Isaac Asímov y que tanto me gustó. El museo está dedicado naturalmente a la ciudad de Londres, pero trata también de modo general toda la historia de Gran Bretaña desde la Prehistoria (con restos de animales de hace miles de años), la Britania Romana, hasta hechos más recientes como los atentados terroristas de 2005 en la estación de King's Cross. Una grata sorpresa este museo al cual no teníamos previsto ir pero que nos encantó.

De camino al hotel paramos en la Catedral de Saint Paul. Es preciosa, enorme, impresionante. Entramos y, al ser Viernes Santo, hay un servicio en marcha con un coro cantando y demás. No podemos pasear mucho por dentro por este motivo pero lo que vemos vale muchísimo la pena. Nunca había entrado y me pareció preciosa.



El sábado le toca el turno a la exhibición en la Torre de Londres de 'Henry VIII, Dressed to Kill'. Como fan de la serie The Tudors y como amante de la historia, era algo que esperaba con mucha ilusión. La entrada (algo carilla) incluye una visita al interior de la Torre, a todo el recinto, a la visita a las Joyas de la Corona y a dicha exposición. La visita a las Joyas nos la saltamos porque la cola para verlas es obscena. En cambio, la exposición 'Dressed to Kill'... eso son palabras mayores. Nada más entrar te encuentras con una pedazo armadura montada en un caballo de mentira, el cual también lleva armadura, que perteneció a Enrique VIII. Todos los instrumentos expuestos pertenecieron en su día al monarca, y hay objetos realmente sorprendentes. No sólo espadacas, armaduras, sino también una pelota de tenis, y las lanzas que usaban para las justas. En la vitrina dedicada a las justas está la lanza del Rey y la de su amigo y Duque de Suffolk, Charles Brandon. Los fans de The Tudors me entenderán.

Bueno, realmente la exposición es digna de ver y os animo a visitarla, estará hasta enero de 2010, así que tenéis tiempo. No dejadla pasar, realmente impresiona y realmente vale la pena pagar los 17 Pounds que cuesta la visita al recinto de la Torre y que incluye dicha exhibición. Además, veréis la torre donde estuvieron presos Sir Tomas Moro y Lady Anne Boleyn antes de ser juzgados y la 'Traitor's Gate'. Todo genial. Y no me enrollo más que no paro. La pena es que no se podían hacer fotos dentro de la exposición, pero...

Con un pelín de discreción... algo sacamos

Durante este fin de semana largo en Londres se decidieron a hacer varias obras y labores de mantenimiento en el metro, cosa que para los residentes y currantes de allí va muy bien porque luego durante la semana lo tienen perfecto, pero que para los turistas ha sido un poco putadita. El metro que nos tenía que llevar desde Tower Hill hasta Hyde Park estaba cerrado. Y también lo estaría el día de la vuelta, pero eso lo cuento más tarde. La cuestión es que esto nos obligó a patear más de lo previsto, de nuevo, subiendo desde la Torre de Londres hasta la Catedral de San Pablo y coger allí un metro, hacer trasbordo... en fin, aventuras. El metro de Londres por suerte es algo que pillas enseguida: al segundo viaje y mapa en mano, le tienes el truco más que cogido.

En Hyde Park toca nuestra visita obligada al Hard Rock Cafe. Nos encanta visitar este restaurante-museo de todas las ciudades a las que vamos. Y este es especial puesto que es el primero que se abrió en todo el mundo. Hay varias joyas expuestas, y yo destaco la guitarra de Zakk Wylde, aunque el material expuesto de The Who, Rolling Stones, Beatles, Queen... es fantástico. Nos comemos los Hard Rock Nachos de rigor, la burguer de rigor y cómo no, lo regamos con sidra irlandesa Magners, de la que somos fans y con la que nos hemos puesto finos durante todo el fin de semana.


Después de comer hay que bajar la hamburguesa, los nachos y la sidra, así que subimos a pie hasta Piccadilly Circus para coger la Shaftsbury Avenue donde se encuentra la tienda de Forbbiden Planet. Después de otro largo paseo toca recogerse, y esta vez sin cenar (el Hard Rock Café tiene la virtud de dejarte satisfecho durante un día entero) porque al día siguiente se termina esta visita relámpago. Una de las cosas más guays del sábado ha sido que sólo ha llovido en tres momentos: el primero, mientras estamos disfrutando de la exhibición sobre Enrique VIII, el segundo, mientras vamos en metro hasta Hyde Park, y el tercero, mientras estamos comiendo en el Hard Rock. Cuando nosotros poníamos los pies en la calle, paraba de llover. Nice!!

Esta mañana temprano hemos cogido el metro y hemos tenido que hacer algún que otro malabarismo para llegar al aeropuerto de Heathrow, debido a las obras en el metro que os comentaba antes. Nada grave: dos trasbordos. Pero todo a la perfección. El vuelo ha ido tan bien que le pregunto a mi novio '¿ya hemos despegado, no?' y me dice 'llevamos un rato en el aire'. Así que, ¿qué más se puede pedir?

Se me olvidaba: cartelacos de Wolverine por todo Londres, en el metro, por la calle, everywhere!!