30

El 16 de marzo de 1979 a las 10.10h de la mañana nací en el Hospital de la Vall d'Hebron de Barcelona. Hoy hace 30 años. Y como del día de mi nacimiento no me acuerdo y todo lo que sé me lo han contado, voy a dedicarme a escribir sobre los recuerdos que tengo de esa época idealizada y mitológica que es nuestra infancia.

Estoy ilusionada porque, ahora que he cumplido los 30, se ha acabado el no sentirme del todo identificada con esos anuncios de la Coca Cola dedicados a las generaciones 'en edad de merecer'. ¡Ahora me toca a mí entenderlos al completo! Qué ganas tenía. La pena es que me parece que este año les ha dado por poner a un bebé y a un viejuno y se dejan a los treintañeros recién estrenados... ¡¡qué mala suerte!!... Así pues, este es mi particular anuncio de Coca Cola:

Yo pertenezco a esa generación de críos que se desgañitaba frente al televisor cuando Gabi, Fofito, Miliki y Milikito preguntaban '¡¿Cómo están ustedes?!' y nosotros respondíamos: '¡¡¡Bieeeeeeeeen!!!'. Tenía una mascota, un periquito, que se llamaba Fofito y que se murió de frío porque se nos olvidó entrarlo del balcón una noche. Para mí, Nochevieja era sinónimo de Martes y 13, y los sábados por la mañana eran para La Bola de Cristal. Cada Navidad ponían Los Fantasmas Atacan al Jefe de Bill Murray, una españolada titulada La Gran Familia, me parece, y cada verano repetían Verano Azul. Tuve un vídeo BETA y luego vino el VHS, y el mando a distancia de mi casa era yo. Veía Heidi, Marco, Los Tres Mosqueperros,... el abandono del nido de Emilio Aragón con aquel programa de gags 'Ni en vivo ni en directo'; los inicios de TV3, la televisión de Catalunya, con series míticas como 'A Dalt i a Baix' o la brasileña 'Dancing Days'... Pude ver (cuando el horario escolar lo permitía) culebrones legendarios como Cristal, Los Ricos También Lloran, Los Colby, Dinastía...

Los viernes por la noche veíamos el Un, Dos, Tres... yo tuve una botilde que se enganchaba al tobillo con una cuerda y había que hacerla girar y saltar con la otra pierna..., y nos contagiábamos de la risa de Maira Gómez-Kemp, imitábamos a la Bombi con eso de 'y eeeso dueeeeleeee...' y coreábamos el 'veintidós, veintidós' con el Dúo Sacapuntas. Y a Sabrina una Navidad se le 'escapó' un pecho del corpiño y aquello fue un escándalo. Y fui al cine a ver pelis como Cazafantasmas, Regreso al Futuro, Los Goonies, Superman,... ¡Loca Academia de Policía! Patrick Swayze era conocido por aquel entonces como 'el cojo de Norte y Sur' y después nos dejó ojipláticos y boquiabiertos con aquella maravilla que fue Dirty Dancing.

Qué grande fue también vivir en directo los cabreos del tenista John McEnroe, y oir de boca de Samaranch aquello de 'à la ville de... ¡Barcelona!', y saltar con mi madre por el comedor porque nos había tocado ser sede olímpica, mientras Maragall salía en la tele haciendo lo mismo. Ben Johnson y Carl Lewis eran superhombres, Perico Delgado y más tarde Indurain hicieron que el ciclismo fuese un poco menos aburrido, y en el Barça jugaba Maradona, y Schuster, y luego llegó el Dream Team de Cruyff unos añitos después.

Recuerdo un póster en mi habitación de Michael Jackson, del disco de Thriller, con la chupa de cuero roja. Uno de los mejores vídeo clips de todos los tiempos. Y me dedicaba a aterrorizar a mi hermana (que nació cuando yo tenía 5 años) con ese póster y con ese vídeo clip. A mí me traumatizaron Enrique y Ana, cuando le cantaban al 'amigo Félix, cuando llegues al cielo...', en homenaje a Félix Rodríguez de la Fuente, que se fue siendo yo muy pequeña, o con la gallina Cocouaua, que lloraba porque se le murió su mamá. Afortunadamente Los Payasos de la tele ponían la nota alegre y humorística, con canciones que hoy en día sigue escuchando mi sobrino, tantos años después, y gracias a la hiperactividad de Miliki.


El fragmento del famoso baile

Pronto me interesó otro tipo de música, y movía la cabeza compulsivamente al ritmo de The Final Countdown de los Europe, a los que, ¡quién me lo iba a decir!, he llegado a ver en vivo y sigo escuchando... y a los que Alianza Popular (antes de ser el PP) les compró los derechos de este super éxito para una campaña electoral. Bon Jovi sacó el Slippery When Wet y yo tuve el single de You Give Love a Bad Name en vinilo, en el cual aparecía parte de una chica con una camiseta mojada, portada que fue censurada después. Uff... decir que a Bon Jovi se les censuró algo algún día, es decir que eso ocurrió hace mucho, mucho tiempo.

Pero en realidad, cuando se mira atrás y se tienen todos estos recuerdos tan vívidos, no te parece que haga tanto tiempo de cuando ibas al cole, jugabas al Tragabolas y en la verbena de San Juan tirabas 'bombetas' y sacudías bengalas; o cuando te quitaron las dos ruedecitas de atrás de la bici, cuando aprendiste a patinar o cuando tirarte por un tobogán era una atracción súper emocionante.

Y hasta aquí, este Mundo Viejuno tan particular.