lunes, 30 de julio de 2012

Danza de Dragones. (¡¡Sin Spoilers!!)



Quiero que este post sea sin spoilers, porque si quiero recomendar su lectura, no me puedo dedicar a destriparlo. Los que ya lo han leído, ya tienen su opinión, y el conocer mis teorías, miedos y alegrías, no les harán cambiarla. Así que me veo frente a la hoja (virtual) en blanco, y me doy cuenta de que no voy a poder decir el nombre de ningún personaje porque con Canción de Hielo y Fuego en esta página estás, ¿pero en la siguiente…?

Han sido tres semanas entregada en cuerpo y alma al quinto volumen de la saga. Y al terminar, entro en internet, busco opiniones y cuál no es mi sorpresa al ver que hay muchos detractores de Danza de Dragones, más de lo que esperaba. Y hacen que me sienta aún más afortunada. Algunas de estas opiniones contrarias coinciden en que se trata de una continuación de Festín de Cuervos (porque lo es), que es aburrido y que sobra mucha paja. Incluso una amiga que lo leyó antes que yo, se sorprendió ante mi entusiasmo y me dijo que ella no lo pone ni de lejos a la altura de los tres primeros.

Pues yo sí. Yo lo he disfrutado al nivel que disfruté aquella maravilla adictiva y enloquecedora que fue Tormenta de Espadas. Me ha parecido que está totalmente a la altura y sobre todo destaco que está lleno de sorpresas, algo muy de agradecer llegados a este punto de la historia, en el que sería fácil caer en la monotonía que da el conocer bastante a casi todos los personajes principales.

A Danza de Dragones vuelven los personajes olvidados en Festín de Cuervos, pero no con exclusividad, ya que a partir de cierto punto, estos se unen a los que tuvieron todo el protagonismo en el cuarto volumen, y se nos explica lo que les ocurre, aunque sea de manera breve. Para mí, uno de los grandes aciertos de la novela, ya que resulta hasta emocionante leer según qué nombres en la cabecera de los capítulos que llegan a partir de la intersección, y como no soy de mirar el índice antes de empezar, el factor sorpresa hizo su magia.

Pero independientemente de quién aparezca, de quién viva o muera, la historia siempre gira entorno a conseguir el poder, desde el punto de vista de los que siguen jugando al juego de tronos y también de los que se ven arrastrados por la ambición, por el amor o por la mera casualidad. Un juego de tronos que en este volumen está curiosamente representado por el juego del sitrang, una especie de ajedrez en el que los contrincantes se juegan el trono, sirviéndose de castillos, soldados e incluso de dragones.

Niños, ancianos, nobles, guerreros, reyes y plebeyos… el abanico de personajes es tan abrumador como al principio, aunque ahora ya estemos acostumbrados y sepamos detectar a nuestros favoritos, a los que creemos más importantes. Pero si ya has llegado hasta aquí, o quizá no es necesario que tan lejos, ya sabrás que es peligroso encariñarse con cualquier personaje. Las muertes sorprendentes siguen siendo protagonistas en Danza de Dragones. Muertes que a una le pueden arruinar un desayuno, sin ir más lejos. Y quien habla de muertes, habla de apariciones inesperadas, relaciones chocantes, y tramas enteras que cuando llegan a término, te dejan con cara de idiota, ni más ni menos.

En la novela no faltan el sexo y la violencia, y en ocasiones, llegan de la mano. Los personajes más salvajes, despiadados y crueles, conviven con las historias de devoto amor fraternal y de lealtad sincera. Con facilidad pasmosa, Martin consigue que sintamos lástima por personajes a los que anteriormente odiábamos a muerte y que estemos deseando que se salven de las garras de ese nuevo villano, que supera en maldad al que creíamos insuperable.

También se nos da la oportunidad de ampliar horizontes: de conocer otras tierras, imaginar escenarios impresionantes y sobre todo, de descubrir otras culturas, religiones, incluso costumbres gastronómicas, en ocasiones muy sorprendentes.

A George R.R. Martin es muy fácil amarlo por los buenos momentos que nos proporciona su arte, pero también es muy fácil odiarle, y no solo porque no le tiembla la mano a la hora de aniquilar a sus criaturas, sino porque sabe cómo hacer sufrir al lector, y cómo atraparlo para que no pueda dejar de leer y no tenga ganas de hacer otra cosa en sus ratos libres. Además, y esto no es ninguna novedad, te lo sirve todo tan bien presentado, que es muy fácil sentarse a devorar el menú, sin descanso y con deleite.

Resumiendo: Danza de Dragones me ha encantado. Me ha hecho pasar buenos ratos, malos ratos… y sobre todo me ha hecho vivir momentos muy intensos. Me vuelve loca cuando un libro consigue atraparte de esta manera, porque al fin y al cabo, es ‘a lo que hemos venido’. Y tras la re-lectura de Juego de Tronos y de Choque de Reyes que hice antes de empezar Danza, ya estoy deseando encontrar por ahí un hueco para leer de nuevo Tormenta de Espadas… Como toda obra excepcional, Canción de Hielo y Fuego es eterna.

7 comentarios:

satrian dijo...

Estos dos últimos libros han sido de transición coinciden en el tiempo y han servido para resituar a los personajes, no están al nivel de los primeros, tienen menos emoción aunque no menos sorpresas, aun así merece mucho la pena leerlos, voy por el primer tomo de "Danza de Dragones" de momento me está gustando más que Festín de Cuervos.

Vanessa dijo...

No estoy para nada de acuerdo con tu comentario, pero bueno, ya lo he explicado antes, así que me lo ahorro... :p

¡Gracias por pasarte a comentar!

Ruth dijo...

Totalmente de acuerdo. Me he entusiasmado hasta la locura con esta "Danza" y lo que más he repetido en mi cabeza mientras lo leía era "no puede ser". Pero sí, sí puede ser. El cuarto me dejó algo desinflada pero con este he vuelto a vibrar como con los primeros. ¡¡Qué gustazo el leer cosas así!!

Vanessa dijo...

Hola Ruth, me alegra que disfrutases de la lectura tanto como yo y te agradezco la visita.

Anónimo dijo...

Después de tanto comentario negativo estaba sin mucha gana de ponerme con él, pero ya que te ha gustado tanto, tu opinión valdrá para ponerme con él.

Antes tendré que leerme algún tipo de resumen de Tormenta de Espadas y Festín de Cuervos, que hace bastante que los leí y no recuerdo exactamente dónde quedó cada cual.

Saludos

AG8109

Vanessa dijo...

Hola, AG!! Hombre, si quieres hacer relecturas antes, no seré yo quien te disuada de hacerlo, pero también te diré que aunque te acuerdes poco, en seguida entras en la historia y pillas el ritmo y es sorprendente cómo vuelven a la memoria cosas que creías olvidadas. Aunque bueno, yo no hace tanto que me los leí: uno o dos años, así que no sé si es tu caso. Gracias por pasarte!! Un saludo.

Brinstar dijo...

En mi opinión, creo que la respuesta negativa que ha tenido mucha gente viene influenciada por la trepidante segunda parte del tercer libro y que ha hecho olvidar a la gente que 'CdHyF' nunca ha sido una novela que tenga un ritmo muy elevado.

También creo que puede influir el hecho de que mucha gente ha descubierto los libros recientemente y se los ha leído todos del tirón. Este factor hace que sea mucho más fácil comparar las distintas partes y por eso, puedo entender que a algunos les parezca más flojo en comparación a otros libros.

En lo que a mi respecta, mi opinión es que esta parte supera con creces a 'Festín de cuervos', y si bien hay una buena parte del libro que parece algo estancada, yo la veo más como una preparación para un desenlace magistral y dificilísimo de resolver.

Feliz verano!