La mejor temporada de
Nurse Jackie hasta la fecha. Subirse a la montaña rusa
que es la vida de Jackie ha sido un auténtico placer. Como siempre, en la serie todo gira en torno a su peculiar protagonista: una enfermera muy poco
ortodoxa, que a veces nos puede llegar a recordar al querido Doctor House,
salvando las distancias. Para ella, el paciente es lo primero y las normas
quedan en un segundo plano. Eso es lo que me gusta de este personaje: que, al
contrario de lo que ocurría con House, la humanidad es su rasgo más
característico.
Jackie tiene sus
métodos, una manera de hacer las cosas a su aire, que tendrá sus consecuencias
en la catarsis de final de temporada a la ya que nos tienen acostumbrados: el
cénit de 13 episodios llenos de despropósitos, riesgos y problemas. En esta
serie, el drama y la comedia se dan la mano, poniendo una de cal y una de
arena. Es uno de sus encantos, junto a un elenco de personajes que hacen las
delicias del espectador.
Si todavía no habéis
conocido a Jackie y a sus acompañantes, no perdáis más el tiempo. Y si ya
habéis tenido el placer de disfrutar de esta cuarta temporada, pasen y lean…
CUIDADO: A partir de
este punto, el post viene cargadito de spoilers de la 4ª temporada de Nurse
Jackie.
La vida de Jackie se
ha despeñado estrepitosamente por un precipicio: está en rehabilitación, su
marido se ha enterado de su infidelidad, quiere el divorcio y la custodia de
las niñas, la relación con su hija mayor es todo lo complicada que podía ser, y
el panorama en el hospital donde trabaja está cambiando a una velocidad de
vértigo, y no a mejor, precisamente.
Aunque su vida entera
se desmorone, cuando Jackie toma las riendas en su puesto de trabajo, se erige
como una guerrera infalible en su batalla contra la injusticia y la enfermedad.
Peca de extremadamente solidaria y de altruista y, cuando se trata de la gente a la que quiere
o de sus pacientes, nada se interpone en su camino. Y mucho menos el Doctor
Cruz, un médico (odioso) puesto a dedo por una gran empresa, que ha desplazado a uno de
sus grandes apoyos: Gloria Akalitus, un personaje maravilloso.
En realidad,
todos los personajes de esta serie son excelentes. Es su punto fuerte. Incluso
el marido o ex marido de Jackie, al que inevitablemente ha tocado cogerle mucha
manía a pesar de que fue un santo varón en el pasado, es un personaje que como
el resto, tiene mucha profundidad. En Nurse Jackie no hay secundarios vacíos
de contenido, todos tienen su historia a cuestas y todos actúan y se relacionan
entre sí tremendamente influidos por ese bagaje, que de una manera u otra, se
encargan de darnos a conocer. Como cualquier persona ‘real’ que se precie, ni
más ni menos.
La combinación de
drama y comedia de la que siempre hace gala la serie, ha tenido en la divina
Doctora O’Hara uno de sus muchos ejemplos, gracias a su embarazo, al cual quiere
enfrentarse sola a pesar de las insistencias del Doctor Cooper, que no dará su
brazo a torcer y que al final, cuando a O’Hara se le caen el mundo y la soledad
encima, cumplirá con su propósito: estar al lado de su amiga.
La amistad es uno de
los pilares fundamentales sobre los que se aguanta esta serie: en la parte
cómica nos fijaríamos en la dulce Zoey y su convivencia con Jackie, ayudándole
en todo lo que necesita y convirtiéndose en una especie de nanny para las niñas, y en la parte dramática, en la relación que
Jackie mantiene con Charlie, el joven drogadicto que conoce en rehabilitación,
que resulta ser el hijo de su nuevo jefe, y que finalmente
encontrará la muerte en brazos de su padre.
De nuevo, un hecho
dramático, el fin de una fugaz carrera autodestructiva, en este apoteósico último
capítulo que pone el punto final a alguna trama, pero que abre también todo un abanico de
posibles historias para lo que vendrá a continuación. Estas nuevas historias
tendrán como epicentro a algunos personajes en paro. Es lo que toca: la crisis,
el paro, y la coyuntura actual que vemos en los medios, presentes también
en las series de televisión.
A saber: la exquisita
Gloria Akalitus y el ‘amigo’ y ex amante de Jackie: Eddie, así como la misma
protagonista, se han quedado sin trabajo. Tanto Eddie como Gloria por su
relación con Jackie, y la ella, por una gran bronca con Cruz, que seguramente
arrancó aplausos a más de un fan, y que deja bien claro quién manda en
urgencias del Hospital All Saints,
por mucha corporación que se haya apoderado del centro y por mucho jefecillo
borde al mando. Jackie is in charge. No teníamos ninguna duda al respecto.
Ha sido una temporada
llena de cambios, sobre todo en lo que afecta a las relaciones entre los
miembros de la plantilla. Ha sido la temporada del embarazo de la Doctora
O’Hara, que lo ha llevado con tanta dignidad como vulnerabilidad, haciéndola un
personaje todavía más adorable de lo que ya era. También ha sido la temporada
de la recuperación de Jackie, de plantarle cara a las drogas y de plantarle
cara también a las normas establecidas, aun perdiendo así su puesto de trabajo.
Una temporada
perfecta, redonda y magistral que ha hecho que esperase con muchas ganas mi
cita semanal de veinte y pocos minutos que pasaron volando y que me tendrán
ansiando ver más de Nurse Jackie hasta la primavera que viene. O eso espero.
2 comentarios:
Tienes toda la razón, la mejor temporada de todas. Genial ese final de episodio "I'm in charge". Por no hablar de Gloria Akalitus ejerciendo de enfermera o el embarazo de O'Hara. O el final de temporada: muerte y nacimiento, drama y comedia a la vez.
¡Gracias por entrar a leer y a comentar! :)
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